El dolor de espalda, o dolor lumbar es uno de los
padecimientos más frecuentes en la población mundial, y de hecho se estima que alrededor
del 70% de las personas, sin importar el sexo, edad, raza u otro factor, ha
experimentado el dolor lumbar por lo menos una vez en su vida.
Causas del dolor de espalda al momento o después de correr.
Después de realizar alguna actividad física, en especial en
el running, los atletas suelen experimentar complicaciones de este tipo debido
a diferentes causas:
- - Mala postura durante el ejercicio.
- -
Lesiones anteriores en esta u otras zonas
cercanas del cuerpo.
-
- Poca flexibilidad de los flexores de la cadera.
-
- Técnica poco adecuada al correr.
-
- Falta de fortaleza en los músculos del núcleo
del cuerpo (core)
-
- Fatiga al correr grandes distancias.
-
- Utilizar los accesorios inadecuados (zapatillas,
ropa, etc)
-
- Correr en terrenos empinados por mucho tiempo.
En general, estas son las causas más frecuentes por las que
ocurre el dolor lumbar en los runners u otros atletas; no obstante, antes de iniciar
un tratamiento, es importante determinar la causa específica por la cual es
causado el malestar. De esta manera, resulta más fácil tomar la iniciativa para
que la lesión no empeore y se pueda regresar a los entrenamientos habituales
cuanto antes.
No obstante, hay que entender que si bien el running puede
ocasionar el dolor de espalda, se ha encontrado evidencia científica que
contrario a lo que normalmente se pensaría, una persona que jamás o no practica
algún tipo de actividad física es más propensa a padecerlo.
Un estudio publicado en The Spine
Journal informó que los corredores con dolor de espalda baja tienen una menor probabilidad
que la población en general. Esta información pudo obtenerse a través del análisis
de diversas resonancias de runners con experiencia, en el que también se
descubrió que los atletas del running tienen una espalda más saludable.
Por otra parte, otro artículo
publicado en 1985 por Delanie Bach y sus colaboradores, estudiaron la cadera de
un grupo de corredores y los análisis se compararon con los arrojados a partir
de personas sedentarias. Se encontró que los runners tenían una flexibilidad en
la cadera más baja y que este déficit podría influir en la aparición del dolor
de espalda. Esta es una de las razones, por las que antes de iniciar cualquier
tratamiento contra el malestar, lo recomendable es visitar a un experto de la
actividad física para encontrar la causa real y así iniciar el tratamiento
ideal.
Prevención del dolor lumbar en el running
Durante las carreras, la zona lumbar
es sometida a un repetitivo estrés, de forma que aquellos que padecen del dolor
de espalda baja de forma constante, deben conocer la causa del mismo y a partir
de ahí iniciar las técnicas correspondientes para reducir la tensión mientras
se corre.
Dado que el core o núcleo del
cuerpo está conformado por diversos músculos, estos también deben ser
entrenados si se desea una zona lumbar saludable para evitar los dolores
durante o después de la práctica de running. Para ello, es posible aplicar
ciertos métodos, entre los que se destacan:
-
* Como en todo tipo de entrenamientos, realizar
los calentamientos necesarios antes de someter a los músculos a esfuerzos
mayores.
- *
Estirar los isquiotibiales dos veces al día, de
forma que se reduzca el estrés producido en la parte baja de la espalda.
- * Mejorar la tonificación de los músculos y
aumentar el volumen de los mismos, prestando especial atención a los músculos
de la espalda baja.
- *
Correr en superficies planas para amortiguar la
presión producida por las pisadas.
- *
Utilizar los zapatos especialmente diseñados para
el running, ya que estos permiten realizar pasos más cómodos.
Si bien el dolor de espalda es uno
de los padecimientos más comunes en la población en general, la práctica del
deporte, en especial del running es una de las mejores formas de prevenirlo,
siempre y cuando sea realizado con la técnica de ejecución adecuada y siguiendo
las recomendaciones mencionadas en el párrafo anterior para no agravar el
problema. Por otra parte, y debido a que las lesiones deportivas es un asunto
que debe tratarse con total delicadeza, es indispensable que al momento de
sufrir algún malestar relacionado con la zona lumbar, debe encontrarle el
causante específico para comenzar el tratamiento necesario y así incitar a una
pronta recuperación. Algunos medicamentos analgésicos suelen disipar la
sensación de dolor, aunque si existe se debe a un déficit de la flexibilidad en
la cadera o de la fuerza en los músculos del core, lo más recomendable es
visitar a un especialista de la actividad física.